LOS GOLES FRENTE A COLON

DOS KILOS POR GOL (DIARIO OLE)INFO DEL DIA DE HOY

Rubén Ramírez cuenta la receta del éxito: la alimentación. "Entendí qué tengo que comer", dice. Ya bajó ocho kilos y metió cuatro goles.

Una vez por semana puedo comer algo que me guste, pero tranquilo, sin excederme". Y valió la pena el esfuerzo. Porque Rubén Ramírez se puso a punto y hoy vive un gran momento en Banfield. Tanto que, con cuatro goles en siete partidos (torneo local y Copa), ya superó lo hecho en la Academia en una temporada (anotó tres veces en 24 encuentros, en 2009). "Por suerte se me abrió el arco", cuenta. Aunque no sólo sabe convertir. Ahora, también, la aguanta, pica al espacio, asiste...

Fue de menor a mayor en su rendimiento y en su cambio mucho tuvo que ver su nueva alimentación. "Le agradezco al profe Otero porque me hizo trabajar mucho y bajé ocho kilos. Ya lo entendí. Me dijeron qué tengo que comer y respeto eso", cuenta Tito, feliz con su nuevo look. Aunque, claro, tampoco quiere perder presencia. "Más no creo que tenga que bajar, sino me van a tumbar fácil", bromea.

Sin duda, para Julio Falcioni, que lo trajo y le dio confianza, el buen nivel de Ramírez implica una alegría doble: "El mérito es de él, por todo el esfuerzo que está haciendo. Por suerte está convirtiendo, lleva tres partidos consecutivos haciendo goles. Es bueno para el grupo, es bueno para él, que se ha preparado, se ha quedado, tuvo una baja importante de peso. Está a la vista su preparación de todos los días para ser el jugador que necesitamos, es el número nueve y lo tenemos que respaldar siempre".

No era tarea fácil la que tenía Tito. Porque su lugar en el equipo titular significaba una responsabilidad mayor: llenar el vacío que dejó Santiago Silva. Sin embargo, él prefiere separar las cosas: "El Tanque tuvo la suerte de salir campeón y goleador. Yo no vengo a reemplazar a nadie, sino a sumar y a aportar mi granito de arena". Aunque ya sueña con repetir lo del charrúa. "Ganar un torneo sería inigualable. Es algo que nunca pude lograr. Además, es también mi primera Copa Libertadores y tengo muchas ilusiones", reconoce.

Con la gran actuación del jueves ante Colón, Ramírez recibió sus primeras ovaciones. "En Banfield los hinchas me bancaron desde el primer día y les estoy muy agradecido, el trato de la gente es halagador. Espero seguir dándoles alegrías", se ilusiona. Y si sigue convirtiendo un gol cada dos kilos que baja la cuenta cierra redonda...